¿Pudiste escuchar lo que te dije hoy? No sé si tengo mucho más para decirte. Bah, en realidad sí. Hay muchas cosas que me gustaría que hablemos. No te voy a contar acerca de mí porque sé que estás, que me viste crecer; siempre te siento. Pero igual te extraño.
Siento culpa porque mucho de lo vivido se perdió en algún rincón del tiempo; perdoname.
Cada tanto visito la playa a la que fuiste el último tiempo. Mentiría si dijera que me acuerdo verte ahí mientras yo iba y venía de la orilla con el balde con agua. No miento si te digo que lo que más quiero es poder ir a la orilla, volver y encontrarte ahí, que me ayudes a construir un castillo.
Quiero una siesta más, que compartamos otro chocolate en secreto, que me abraces. Mientras tanto, te sigo conociendo a través de lo que me cuentan y de lo que veo en las fotos.
Nunca pude aprender a hacer trampa, ya no me va a importar perder. Solo quiero que volvamos a jugar. Esperame.
Te extraño mucho.
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